Google ha estado activo en el mercado de las gafas inteligentes y la realidad aumentada desde 2014. El núcleo de la cartera es Google Glass, que se puso a la venta por primera vez para los primeros usuarios y desarrolladores en 2012.
Las Google AR Glass se denominan Google Glass -y no Google Glasses- porque el dispositivo no es una gafa de datos en el verdadero sentido de la palabra, sino que se puede enroscar en cualquier montura, donde sólo cubre parte de un ojo.
El Google Glass 2 es un ordenador portátil de pleno derecho, sin necesidad de hardware propietario. La pantalla tiene una resolución de 640 x 360 px y un procesador de cuatro núcleos de Qualcomm proporciona la potencia de cálculo necesaria. Se instala un rápido SSD como almacenamiento de datos. Para la grabación y reproducción digital de la realidad aumentada, Google utiliza varios sensores de localización en el espacio, como un GPS, un GLONASS y un sensor de aceleración, así como un giroscopio. La conectividad se establece mediante Bluetooth o WLAN.
Google también ofrece su propia API REST para el desarrollo de aplicaciones de RA para Google Glass. Esto permite integrar las gafas inteligentes en los entornos informáticos existentes. Hasta ahora, las Google Glass son las únicas gafas de realidad aumentada de la empresa tecnológica de Silicon Valley. Con la adquisición de un productor de micro-LED, la empresa está creando los requisitos tecnológicos para un sucesor técnicamente más avanzado.